Escocia sufrió un inicio catastrófico en la Eurocopa 2024 el pasado viernes tras ser aplastada 5-1 por Alemania, el anfitrión y uno de los favoritos al título. Antes del crucial choque contra Suiza, el defensa Kieran Tierney aseguró que su equipo aún cree que puede superar el Grupo A y llegar a los octavos de final de un torneo importante por primera vez en su historia. Sin embargo, cualquier cosa que no sea un resultado positivo en este encuentro hará que esas esperanzas sean extremadamente remotas. Los dirigidos por Steve Clarke no están demostrando ser un equipo capaz de silenciar a sus críticos, ya que la derrota del viernes deja en evidencia que solo tienen una victoria en sus últimos diez partidos (E3, P6). Esa única victoria fue contra la débil Gibraltar. Los fallos de concentración pueden ser la causa de sus recientes malos resultados, permitiendo siete goles después del minuto 70 en sus últimos seis partidos, reflejando una vulnerabilidad en los minutos finales que podría ser